20130508

ZANGDOKPALRI


Uno comprende -cuando el tiempo apremia-
que siempre hay que esperar 
un poco más, 
y darse entonces a un final acorde
con todo lo que fue y ya no será.
Un poco más paciente, 
con algo más a cuestas
-el peso más ligero de la edad.

Y viene entre las nubes la tormenta.
El rayo allí en la noche, 
¿qué voz nueva traerá?;
¿de dónde?, ¿en qué momento?,
¿por quien y cuando  en sueños
iremos otra vez a aquel lugar
en que no corre el tiempo
ni vale ya la pena hablar?
Uno descubre que siempre hay que esperar
un poco más
sin ninguna esperanza. Tan solo agazapado
ante el azar.